La receta de hoy es una de las recetas más sencillas que existen. Se trata de un pan de molde, pero con la diferencia de que se hace en el horno y no en la sartén. Es muy fácil de hacer y además tiene un sabor delicioso. Si te gusta el pan de toda la vida, esta receta te va a encantar.
Lo primero que vamos a hacer es poner en un bol la harina, el azúcar, la sal, el bicarbonato, la levadura y el agua. Mezclamos bien todos los ingredientes hasta que estén bien integrados.
A continuación, añadimos el aceite y mezclamos bien. Después, añadiremos la leche poco a poco, removiendo bien para que no queden grumos. Cuando tengamos la masa lista, la dejamos reposar durante unos 30 minutos.
Pasado este tiempo, estiramos la masa con un rodillo y la cortamos en trozos de unos dos centímetros de grosor. Los colocamos en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear y los dejamos levar durante otros 30 minutos.
Mezclar la harina, el azúcar, la sal y la levadura en un bol.
En primer lugar, ponemos en un recipiente la harina junto con el azúcar y la sal. Mezcla bien todos estos ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
Después, añade la levaduras y mezcla bien. Por último, añade el agua poco a pocopara que la masa quede bien integrada.
Ahora, coloca la masa sobre una superficie enharinada y amasa con las manos hasta que la tengas bien integrada. Deja reposar la masa durante unos 10 minutos.
Una vez que hayas dejado reposar tu masa, estira con un rolo de cocina hasta que tenga un grosor de unos 2 centímetros. Corta la masa en trozo de unos 5 centímetros de largo y corta cada uno de ellos en cuatro partes iguales.
Pon cada trozo en una placa de horno forrada con papel vegetal y deja levar durante unos 20 minutos.
Cuando hayan levado, pincha con un tenedor la masa y si sale limpia, ya está lista para hornear. Hornea los panes durante unos 15 minutos a 180 grados.
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Añadir el agua tibia poco a poco hasta que se forme una masa homogénea.
La receta de hoy es muy sencilla y rápida de hacer. Se trata de un pan de molde que puedes preparar tanto para desayunar como para merendar. Es ideal para llevar al trabajo o para llevar a la escuela. Además, es muy fácil de hacer y no requiere de mucho tiempo. ¡Vamos a ver cómo se hace!
Para empezar, vamos a poner en un cuenco la harina y la mantequilla. Mezclamos bien ambos ingredientes hasta que obtengamos una masa uniforme.
A continuación, añadimos el agua templada poco a poquito hasta que consigamos una consistencia suave y homogéneo. Si vemos que la mezcla se nos pega en las manos, podemos añadir un poco más de harina.
Con la masa ya lista, estiramos con un rodillo hasta que tengamos un grosor: aproximadamente de 1 cm. Cortamos la masa por la mitad y la dividimos en cuatro trozos iguales.
Colocamos cada troza en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear y dejamos levar durante 30 minutos.
Pasado este tiempo, horneamos los panecillos durante unos 12 minutos a 200 grados. Una vez que estén listos, dejamos enfriar sobre una rejilla.
Dejar reposar la masa durante 30 minutos.
En primer lugar, ponemos en un bol la harina, la sal y la levadura. Mezclar bien todos los ingredientes hasta obtener una masa lisa y homogénea.
A partir de aquí, comenzamos a amasar la masa hasta que esté suave y elástica. Dejamos reposar durante 30 min.
Una vez transcurrido este tiempo volvemos a amasa la masa y la dejamos reposar otros 30 min. A continuación, hacemos una bola con la masa, la cubrimos con un paño y la guardamos en un lugar cálido y seco durante 2 horas.
Pasadas las dos horas, sacamos la bola de masa y le damos forma de bola. La colocamos en una superficie enharinada y la aplastamos ligeramente con las manos. Después, la extendemos con un cortador de galletas y la cortamos en rectángulos de unos 10 x 15 cm.
Ponemos los panes en una placa de horno forrada con papel vegetal y los dejamos levar otra vez durante 30min.
Pasados los 30 minutos, hornee los panqueques durante unos 8-10 minutos a 180ºC.
Estirar la masa con un rodillo sobre una superficie enharinada.
Para estirar la pasta, lo mejor es hacerlo con un trozo de papel de cocina o con un poco de harina. Con el rodillo estiramos la masa para que quede fina y uniforme.
Cuando tengamos la masa estirada, la colocamos sobre una bandeja de horno cubierta con papel de hornear y la llevamos al horno precalentado a 180º durante unos 10 minutos.
Mientras se hornea la masa vamos preparando el relleno. Para ello, calentamos el aceite en una sartén y añadimos la cebolla picada. Cuando esté transparente, añadimos el ajo picado y dejamos que se dore un poco.
Seguidamente, añadiremos el tomate triturado y dejaremos que se cocine todo junto durante unos 5 minutos.
Por último, añadíremos el queso rallado y mezclaremos bien. Añadiremos el vino blanco y dejar cocinar todo junto unos 5 minutitos más.
Sacamos la plancha del horno y la espolvoreamos con el queso parmesano rallado. Servimos inmediatamente.
La receta de hoy es muy sencilla y rápida de hacer. Se trata de unas croquetas de jamón y queso que están buenísimas.
Cortar la masa en rectángulos de unos 20 x 10 cm.
Cortar la mantequilla en dados pequeños y añadirla a la mezcla anterior. Mezclar bien hasta que se integren todos los ingredientes.
Con la ayuda de una cuchara, formar bolitas de masa y aplastarlas ligeramente con las manos. Colocarlas en una bandejade horno forrada con papel vegetal y hornearlas durante unos 15 minutos.
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En esta ocasión os traigo una receta de tortilla de patatas fácil y rápida. Es una receta que me encanta porque es muy sana y además es muy fácil de hacer.
Esta receta de Tortilla de Patatas es muy parecida a la que suelo hacer yo en casa. La diferencia es que en esta ocasión he utilizado patata nueva, que es más tierna y jugosa que la patata normal. Además, he utilizado cebolla caramelizada, que le da un sabor muy rico y diferente.
Lo primero que haremos será pelar las patatas y cortarlas en rodajas finas. Las pondremos en una olla con agua fría y salaremos. Dejaremos que hiervan durante unos 30 minutos.
Colocar los rectángulos sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal.
Para preparar la salsa, ponemos en una sartén el aceite de oliva y añadimos la cebolla cortada en juliana. Cuando esté transparente, añadimos el ajo picado y dejamos que se dore un poco. Añadimos el tomate triturado y removemos bien. Incorporamos el vino blanco y dejamos reducir un poco.
Cuando la salsa esté reducida, añadiremos el jamón serrano cortado en dados y dejaremos que se reduzca un poco más. Incorporaremos la nata líquida y dejar cocinar unos minutos más.
Una vez tengamos la salsa lista, la vertemos sobre la tortilla y la dejamos reposar unos minutos para que se impregne bien de la salsa.
La receta de hoy es una receta muy sencilla y rápida de hacer. Se trata de unas croquetas de jamón y queso que están buenísimas. Son muy fáciles de hacer y quedan muy ricas.
Las croquetas son un plato típico de la gastronomía española. Se suelen hacer con carne picada, pero también se pueden hacer con otros ingredientes como verduras, pescado o incluso con frutas. En este caso vamos a hacer unas croquetitas de jamon y queso.
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